La pobreza alcanzó a más de la mitad de los argentinos en los primeros seis meses de la gestión ultraderechista, mientras la economía y el consumo no paran de caer el gobierno, lejos de hacer una autocritica dice que esto es culpa de los K.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) reveló este jueves un dato escalofriante: durante el primer semestre de 2024, 52,9% de la población argentina se encontró debajo de la línea de la pobreza y 18,1% debajo de la línea de la indigencia, un número similar al relevado por el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (UCA), que aseguró que durante el primer trimestre de 2024 la pobreza llegó al 54,9% y la indigencia al 20,3%.
Con respecto al segundo semestre de 2023, la incidencia de la pobreza en el primer semestre de 2024 registró un aumento tanto en los hogares como en las personas, de 10,7 y 11,2 puntos porcentuales (p.p.) respectivamente. En el caso de la indigencia, mostró un aumento de 4,9 p.p. en los hogares y de 6,2 p.p. en las personas, precisó el Indec. En la medición interanual, la indigencia prácticamente se duplicó, ya que había sido del 9,3% en el primer semestre de 2023.
A su vez, los más afectados por la pobreza son los niños y jóvenes. En ese sentido, dos tercios (66,1%) de las personas de 0 a 14 años forman parte de hogares bajo la línea de pobreza, mientras que el porcentaje total de personas bajo la línea de pobreza para los grupos de 15 a 29 años y de 30 a 64 años es de 60,7% y 48,6%, respectivamente. Al contrario, en la población de 65 años y más, el 29,7% de las personas se ubicó bajo la línea de pobreza.
El informe publicado por el INDEC este jueves marca un importante salto respecto al relevamiento anterior del organismo, correspondiente al segundo semestre de 2023, cuando el 41,7% de las personas se encontraban bajo la línea de la pobreza y el 11,9% por debajo de la línea de indigencia.
Según la información difundida por el INDEC, basada en la Encuesta Permanente de Hogares, en el primer semestre de 2024 hubo 29,6 millones de personas (52,9%) y 4,3 millones de hogares (42,5%) en situación de pobreza, que no alcanzaron a cubrir la canasta básica total promedio del hogar, de $709.318.
De ese total, 5,4 millones de personas (18,%) y 1,4 millones de hogares (13,6%) estaban también en situación de indigencia, porque no alcanzaron a cubrir la canasta básica alimentaria promedio del hogar, valuada en $349.073.
La entidad detalló, además, que «entre el 2° semestre de 2023 y el 1° semestre de 2024, el ingreso total medio de los hogares aumentó 87,8% frente a subas de 115,3% en la canasta básica alimentaria (CBA) y de 119,3% en la total (CBT)».
En cuanto a la distribución geográfica, las mayores incidencias de la pobreza en personas se observaron en las regiones Noreste (NEA), 62,9%; y Noroeste (NOA), 57,0%. Las menores, por su parte, se registraron en las regiones Patagonia, 49,1%; y Pampeana, 49,9%. En cualquier caso, el aumento de la pobreza y la indigencia se dio en todas las regiones.
Por la metodología que utiliza el organismo estadístico, se trata de un promedio de estos indicadores durante el período analizado, en este caso el primer semestre de 2024. Concretamente, el Indec realiza una comparación entre el promedio del primer trimestre con el promedio del segundo trimestre.
Tras conocerse los datos del Indec, dirigentes de la oposición advirtieron por el deterioro de la situación social: «Está claro que ningún problema arrancó en la Argentina en los últimos nueve meses, pero es evidente que todos se agravaron. Los números del Indec muestran que la situación está muy difícil para las familias, porque hay una suba muy fuerte de los costos fijos y una caída del empleo”, afirmó Daniel Arroyo, diputado nacional de Unión por la Patria y ex ministro de Desarrollo Social.
Mientras se daban estos datos, Karina Milei, subía a sus redes sociales una foto de ella sonriente junto a Susana Giménez y un perro, como diría Susana «¡Vivo!»