La votación en particular de la ley ómnibus no sobrevivió a la primera jornada en Diputados. Se cayó cuando el oficialismo empezó a perder incisos claves de la cesión de facultades extraordinarias. Ante la falta de apoyo, mandó todo de vuelta a comisión.
Desde la madrugada israelí, el presidente, con su actuar verborrágico desde X se puso a dar me gusta a tuits que proponen una «guerra» luego de la derrota en el Congreso, algunos dicen que Milei analizaba «seriamente» llamar a un plebiscito.
La Constitución Nacional establece en su artículo 40 que el presidente sólo puede convocar a una consulta popular no vinculante, sin que el voto sea obligatorio. Sólo el Congreso puede convocar a una consulta popular para convertir un proyecto en ley.
La Ley Ómnibus, después de un mes de negociaciones y en la cuarta jornada de tratamiento en el recinto, volverá a comisiones. El presidente del bloque de La Libertad Avanza, Oscar Zago, tomó la palabra y pidió votar el artículo 127, inciso 8, del reglamento de la Cámara de Diputados que ordena: «Que el asunto se envíe o vuelva a comisión». La moción se aprobó a mano alzada y el presidente Martín Menem anunció: «Se levanta la sesión».
Durante unos minutos el insólito episodio abrió el interrogante para saber qué pasaría con la votación en general aprobada el viernes pasado y con los artículos votados durante la sesión de este martes.
Sin embargo, tras salir del recinto, varios diputados mencionaron que en el reglamento de la Cámara figura el artículo 155, en el se estipula que «un proyecto que, después de sancionado en general, o en general y parcialmenteen particular, vuelve a comisión, al considerarlo nuevamente la Cámara, se le someterá al trámite ordinario como si no hubiese recibido sanción alguna».
El momento en el que el Gobierno nacional supo que no tenía los votos de la oposición Light
Antes de que se suspenda la sesión, hubo un cuarto intermedio entre la oposición light y el oficialismo para intentar salvar la votación. Fue precedido de una frase categórica del presidente del bloque de Hacemos Coalición Federal –bloque que ya había votar en contra el artículo 4 de facultades delegadas–. «Al oficialismo le pedimos que tenga una cuota de flexibilidad, les encanta seguir perdiendo», invitó Miguel Ángel Pichetto.
Qué decía el artículo de privatizaciones que no se trató
El artículo 7 habilitaba a la privatización «total o parcialmente o liquidar empresas, sociedades, establecimientos o haciendas productivas cuya propiedad pertenezca total o parcialmente al Estado Nacional». Una de las concesiones que se le había arrancado al oficialismo en la negociación fue que en el proceso de privatizaciones que se llevara adelante intervendría la “Comisión Bicameral de Seguimiento de las Privatizaciones”.
Además, tras la votación en general del viernes se agregó un nuevo artículo, sin número, que indica que la declaración de «sujeta a privatización» de cualquier empresa del Estado «será hecha por el Poder Ejecutivo nacional, la cual deberá ser aprobada por ley del Congreso», dándole trámite de preferencia.
En tanto, desde la cuenta de la Oficina del Presidente, el Gobierno publicó un comunicado con su evaluación sobre lo sucedido en el que también apuntó contra los mandatarios provinciales. «Los gobernadores tomaron la decisión de destruir la ‘Ley Bases y Puntos para la Libertad de los Argentinos’ artículo por artículo, horas después de acordar acompañarla», critica el comunicado sobre el resultado de las negociaciones.
Y luego apunta: «Decidieron darle la espalda a los argentinos para proteger sus intereses e impedir que el Gobierno Nacional cuente con las herramientas para resolver los problemas estructurales de la Argentina». El horizonte para el Gobierno quedará para después del 1 de marzo en la apertura de sesiones ordinarias. «La ley se debatirá cuando entiendan que es el pueblo quien la necesita, no el Gobierno», sostiene el comunicado oficial.